Vistas de página en total

domingo, 7 de junio de 2015

FACTORES AMBIENTALES PARA LA PESCA DE LA LUBINA



Buenos días blogueros, 

Tras varios días de inactividad volvemos con más ganas que nunca. Por temas laborales y de estudios, no hemos podido dedicarle esos minutos tan preciados que necesita “nuestro mundo”, pero ya estamos de nuevo por aquí para hacer más completo día a día este trocito de paraíso.

En esta entrada vamos a hacer un repaso de los distintos factores que después de muchas salidas de pesca hemos considerado indispensables y que vienen a ser, en cierta medida, las costumbres de las lobas. Estos factores los hemos agrupados en dos categorías: factores de temporada y factores climatológicos.


FACTORES DE TEMPORADA

Tal y como podemos observar en el post de “LOCALIZANDO LUBINAS”, la mejor época para nuestras amigas las lubinas y las bailas abarca los meses de octubre a marzo, ya que al menos por nuestras costas del sur estos magníficos serránidos se acercan hasta la mismísima orilla en busca de su alimento.

El motivo de tal acercamiento en estos meses fríos es que, durante el período invernal, esta especie comienza su ciclo de reproducción, terminándolo allá por la primavera junto con la subida de las temperaturas.

En septiembre y octubre (dependiendo del tiempo que tengamos, y si empiezan a entrar las tan ansiadas borrascas) comienzan a acercarse a la costa, ya que el agua empieza poco a poco a enfriarse. Ellas lo notan y comienzan, pues, a desperezarse de su letargo veraniego en el cual se retiraron a aguas más profundas y a ríos, donde hay mayor estabilidad en la temperatura del agua y más alimento. Es, durante esta época, cuando podemos empezar a buscarlas en las playas en función de los factores que desglosaremos más adelante.


 
FACTORES CLIMATOLOGICOS

La loba, como buen depredador, necesita un ambiente atmosférico en el que predominen las bajas presiones, puesto que de esta forma podrá camuflarse mejor debido, principalmente, a que:
  1. En los días nublados, de lluvia, los rayos del sol y la luna no penetran en el agua y, por lo tanto, la visibilidad es mucho menor dentro de la misma influyendo de manera muy positiva para que nuestra amiga pueda camuflarse con mayor facilidad. 
  2. En estos días de tiempo revuelto se suele levantar, además, un viento que remueve las aguas y hace que estén tapadas, con lo que los “peces pasto” (aquellos que la loba busca incesantemente para alimentarse) pierden el miedo y se aventuran a nadar más libremente alimentándose de la comida que se levanta del fondo en estos días. Según el viento, nos podemos encontrar con múltiples variantes a la hora de salir en busca de nuestras amigas:
  • En primer lugar, nos encontramos con el viento de norte, el cual nos ofrece, según la intensidad con la que sople, la posibilidad de quedarnos en casa y aprovechar para elaborar aparejos o bien, en caso de que la intensidad sea baja, acercarnos a pozas resguardadas o a muelles que estén dotados de luz artificial y buscarlos en las zonas próximas a la penumbra, es ahí donde estarán los más entrados en kilos.
  • En segundo lugar, el escenario es el punto cardinal opuesto, mi preferido, el viento del Sur. Con éste escenario, aún soplando a baja intensidad, las aguas estarán movidas y, cuanta más intensidad, más oleaje y más tapada estará el agua de nuestro pesquero, siendo un momento idóneo para buscarlas muy cerca de la orilla.
  • En tercer lugar, en situación de vientos de poniente, los cuales suelen venir acompañados de inestabilidad, suele ser buen momento para buscarlas por cualquier parte, ya que antes estos sistemas de bajas presiones traídos por estos vientos, nuestra amiga la loba caza por todas las zonas inimaginables.
  • En cuarto lugar, el viento de levante, muy óptimo para zonas de playa, sobre todo las de aguas someras, ya que por la situación geográfica de la costa onubense estos vientos levantan del fondo marino todo tipo de crustáceos y provocan que se tapen las aguas.
En resumen, el cuadro perfecto para la pesca surfcasting en nuestras playas se enmarca dentro de un panorama de vientos moderados de sur-suroeste, los cuales suelen venir acompañados de inestabilidad que tendremos que saber leer lo suficiente para aprovechar esas aguas agitadas que tantas lubinas acercan a nuestras orillas.


Otro factor climatológico muy a tener en cuenta con nuestra amiga, son los sistemas de altas y bajas presiones. A continuación detallamos lo que necesitamos saber con respecto a los mismos:
  • Sistema de altas presiones: durante el paso de un sistema de altas presiones nos encontraremos con el buen tiempo de cara, serán días en los que la estabilidad atmosférica será la que predomine siendo, de esta manera, indispensable buscar lobas en playas con zonas de piedra, en desembocaduras de ríos y las habituales pozas de los muelles pesqueros.
  • Sistema de bajas presiones: en este escenario no cabe duda de que nos dispondremos a buscar a nuestras amigas en playas, aprovechando las mareas vivas o muertas, para dirigirnos a zonas de mayor o menor calado, buscando la rompiente lo más cercana posible a la costa.
 

             
FACTORES SOLUNARES

Otro dato a tener en cuenta en nuestras salidas de pesca son los períodos solunares en los que, tal y como podemos observar en las distintas tablas de mares que nos encontramos en la red, constan de períodos de luna llena, luna nueva y los cuartos creciente y menguante.

  • Luna llena (mareas vivas). Durante el ciclo de la luna llena nos encontraremos mareas grandes, con altos coeficientes, que llenan y vacían mucho, por lo que conllevará fuertes corrientes que aprovecharemos para acercarnos a playas con fondos someros y bajos, los cuales provocarán mucha espuma debido al choque de estas corrientes con los mismos. El único inconveniente que nos puede presentar esta luna es que, en noches en las que el cielo esté despejado, iluminará demasiado y la lubina andará un poco recelosa. Habrá que hilar muy fino para engañarlas.
  • Luna nueva (mareas vivas). Es en este momento cuando podemos aprovechar todo lo mencionado en el párrafo anterior, ya que aun teniendo cielos despejados, nos encontraremos con absoluta oscuridad y nuestras amigas cazarán a sus anchas por los arenales de nuestras playas.
  • Cuarto creciente y cuarto menguante. Son momentos en los que es preferible buscarlas por playas con pedreros, con más profundidad, ya que al no tener ese poder mencionado en las mareas vivas, no insuflan de agua y vida nuestras playas, teniendo poca profundidad y corrientes, siendo necesario buscarlas en las playas mencionadas anteriormente y en zonas de pozas, ríos y muelles.


 
FACTOR TEMPERATURA DEL AGUA

La temperatura del agua también es un factor a tener muy en cuenta puesto que un agua demasiado templada hará que nuestras amigas emigren a zonas más profundas y un agua demasiado fría producirá el mismo efecto. La temperatura idónea para salir en busca de lubinas y bailas oscila entre los 13ºC y los 19ºC.

No cabe duda de que todo esto son datos orientativos que si los valoramos y los estudiamos a lo largo de la semana, podremos planificar con antelación nuestra salida, y si tenemos la destreza y la suerte de combinarlos y que se den las circunstancias idóneas, tendremos muchas más probabilidades de sacar la pieza que todo pescador de surfcasting sueña. Ánimo y a buscarlas, que están ahí esperándonos.